Cuando sonó el teléfono y vimos que eran Irene y Vicente de My Noah Candy les dijimos que sí antes de saber de qué se trataba y es que cualquier cosa que nos propongan siempre es un buen plan. En este caso era un shotting ambientado en el invierno en un lugar que no conocíamos y que ahora no vamos a olvidar: el palacio de Figueras.
La idea era hacer una boda de invierno, una época preciosa en la que cada vez se anima más gente a dar el sí quiero y es que son celebraciones preciosas, románticas y especialmente acogedoras.
El traje de la novia, diseñado por Nicolás Costura, era precioso. Mezclaba dos tonos y texturas diferentes y a nosotros nos recordaba a las primeras nieves de la temporada.
Por eso pensamos en un ramo sin verde, con ramaje otoñado, tonos malvas y morados. Tenía un aspecto “congelado” como si el tiempo no fuera a pasar por él.
Para la mesa pensamos en algo muy barroco, con muchas velas a distintas alturas y mezclando telas. La idea era crear algo acogedor, romántico y muy especial. Con tonos propios de la estación, pero distintos a los habituales de la Navidad.
Ha sido un placer coincidir con todos los compañeros en un lugar tan bonito, nos vemos en las últimas bodas del año.
Hector Torra, Barbareando, Yasmina Riera Maquilladora, Calzados la Jaula, Eva Vidal y nuestra modelo Claudia M Fernández.
Todas las fotos las hizo Pelayo Lacazette