En estas mismas fechas, el año pasado hicimos balance de las bodas de 2014, que por cierto habían dejado el listón muy alto, y queremos hacer lo mismo con las de 2015.
Han sido doce meses llenos no solo de bodas, porque las bodas duran solo un día y para nosotros es mucho más que eso: son los novios, las familias, las historias y los recuerdos que nos dejan. Las llamadas, reuniones, pruebas, mensajes, anécdotas y también las fotos.
Hemos tenido bodas en primavera, verano, otoño e invierno y en todas las estaciones hemos encontrado motivos de peso para celebrar la boda en esa época del año.
Hemos decorado la catedral para bodas de muchos invitados y capillas para celebraciones familiares, también ceremonias civiles junto al mar y en la montaña.
Hemos coincidido con novios que conocíamos de toda la vida y con otros a los que no habíamos visto nunca hasta que llegaron a la tienda y se quedaron.
Hemos hecho bodas en el campo y también en el corazón de Oviedo. En Asturias y fuera del principado. Cerca y lejos. En palacios y también en casas particulares. En sitios grandes y pequeños.
Con grandes invitados y pequeños protagonistas.
Rodrigo Cores.
Continuara…