Adriana ha sido una de las novias más ilusionadas y felices que han pasado por aquí. Su sonrisa lo decía todo pero, áun así, vamos a contaros cosas sobre su preciosa boda.
El tocado de flores de cera que le hizo Paula de Le Touquet tenía un colorido muy especial y decidimos “pintar” el ramo con los mismos tonos: rosados, azules, blancos…
El velo de tul de seda en rosa empolvado dejaba ver el escote de la espalda hecho con un juego de puntillas muy especial por Nicolás Costura.
El ramo estaba dividido en dos y llevaba una cinta de terciopelo y una chapa de La Señorita que nos trajo la novia.
La Iglesia de Luanco se encuentra al borde del mar rodeada por un pequeño jardín. Colocamos dos grandes adornos a ambos lados del altar y dejamos todo el protagonismo al retablo barroco y a los novios.
Todo el mundo esperaba la llegada de la novia con mucha expectación, especialmente su cortejo, con divertidos mensajes escritos en pizarras.
A los novios fuera les esperaba una lluvia de pétalos de rosa, arroz y un arco hecho con remos por los amigos piragüistas del novio.
Con todos esos besos y abrazos nos despedimos hasta la semana que viene donde continuaremos el viaje con ellos.
Fotos: La Mar Studio